Isildur no es cualquier personaje, Isildur es «El personaje». ¿Por qué? Porque ocupa un lugar privilegiado en todos los escritos de Tolkien.
En la serie de Anillos de Poder de Amazon aún no ha desatado todo su potencial, pero estoy convencido de que Isildur acabará siendo tan central como Galadriel o Halbrand (Sauron como se le empieza a denominar).
Ahora la pregunta que se nos plantea es la siguiente: ¿cuál será el papel de Isildur?
Isildur y los Edain
Isildur será quien lidere a los Edain en la guerra contra el señor oscuro de Mordor durante la Segunda Edad que está abordando la serie de Amazon. Y no solo eso, como es bien sabido Isildur será el responsable de cortar el Anillo Único de la mano de Sauron con los restos de la espada de su padre, Elendil.
Siempre se ha debatido sobre su verdadera relevancia en los acontecimientos, pues, como está plasmando Anillos de Poder, Isildur puede no parecer importante. La importancia surge del hecho que es él quien da el golpe fatal y final a Sauron, es él quien consigue la victoria para los pueblos libres de la Tierra media cuando todo estaba perdido.
Sobre él sabemos además que fue uno de los fieles númenóreanos, de los que hablaré más adelante.
Isildur es la persona que sobrevive a la caída de Númenor, para llegar después a la Tierra Media y ayudar a forjar los que serían sus propios reinos: Gondor y Arnor. Su reinado acabaría convirtiéndose en maldito, él mismo maldijo a sus descendientes (probablemente incapacitado por el daño que el Único le había producido).
Su traición por el Anillo Único es la razón principal por la que la línea de reyes se rompió y Gondor cayó en la ruina. Incluso miles de años después de su muerte, el heredero de Isildur, Aragorn, fue perseguido por los mismos demonios.
El Silmarillion y los Cuentos inconclusos
Hablemos del personaje basándonos en los dos relatos que más van a influir al Isildur de Anillos de Poder: la obra del Silmarillion y los Cuentos inconclusos de Númenor y la Tierra Media.
Si seguimos la obra de Tolkien, habrá dos factores determinantes en el desarrollo del personaje. De un lado el ascenso de los fieles (aquellos que son amigos de los elfos en Númenor) y, de otro lado, la creación de los reinos de Gondor y Arnor en la Tierra Media.
De hecho, el próximo artículo de Anillos de Poder será sobre cómo se crearon y forjaron estos dos reinos.
Isildur y los fieles de Númenor
Es llegando al final de la Segundad Edad cuando los soberanos de Númenor empiezan a crearse enemistades con los elfos. Tanto fue así, que la mayoría de la isla renunció de sus creencias ancestrales, aquellas que les vinculaban con los elfos, los Valar y el origen de Númenor.
Solo mencionar que los orígenes de Númenor están estrechamente vinculados con los Valar, a quienes los númenóreanos solían orar.
Será después de la Guerra de la Cólera cuando estos empiecen a renunciar de su pasado, de su herencia, cegados por el orgullo y la insensatez.
Isildur vio la luz entre tanta turbulencia política en el año 3.209 de la Segundad Edad. Era el primogénito de Elendil, y hermano de Anarion (con quien se llevaba 10 años de diferencia).
La familia de Elendil e Isildur pertenecían a la minoría social de los fieles. Estos eran aquellos que habían identificado cómo la isla estaba alejándose de sus orígenes, valores y principios. Los fieles eran quienes pretendían redirigir la situación de Númenor, y alejar a la isla de la catástrofe.
En ese contexto de agitación política generado entre los fieles, fue cuando nació Isildur.
Tar-Palantir y Ar-Pharazôn
Tar-Palantir ascendió al trono con la intención de volver a reestablecer las antiguas costumbres, con el objetivo de salvar al reino de la catástrofe anunciada. Sí, la misma que vimos en el palantír de Anillos de Poder.
La cuestión es que, para cuando Tar-Palantir intentó volver la vista atrás y retomar la senda de la razón, era demasiado tarde. La muerte de Tar-Palantir trajo al trono de Númenor a Ar-Pharazôn, lo que desencadenaría una catástrofe para la isla.
Ar-Pharazôn no solo despreciaba las viejas costumbres, sino que se regocijaba de promover una política nacionalista de Númenor. Tanto fue así que, llegado el momento todo se volvería en contra de Númenor.
Los ejércitos de Númenor derrotaron al enemigo, al señor oscuro Sauron, e incluso llegaron a hacerlo prisionero. El problema vino cuando Sauron, una vez prisionero en Númenor, se ganó el favor del Rey y le convenció para atacar el Reino de Valinor.
Retar a los Valar y navegar por el mar dirección a las Tierras Imperecederas era algo que Eru-Ilúvatar no iba ni a permitir, ni a perdonar. Aplastó Númenor con una tormenta que hundió la isla. Númenor pasó a ser leyenda.
Elendil, Isildur y gran parte de los fieles, consiguieron escapar del destino de la isla. Gracias a que habían construido barcos, pudieron escapar rumbo a la Tierra Media, donde forjarían los reinos de Gondor y Arnor.
Aún no lo sabían, pero aquello los llevaría a la batalla de la Última Gran Alianza.
Sin duda, y con esto termino por hoy, nos queda mucho por ver en Anillos de Poder. Ojalá la espera merezca la pena.